Mantarraya MX da la bienvenida con una amplia sala con cocina vista, y donde se combinan materiales nobles con otras piezas tradicionales para generar una atmósfera de sofisticación sin pretensiones. Desde ahí, se llega a la terraza de invierno, cuyo techo hace sentirse como en un paradisiaco refugio gracias a los elementos naturales que lo recubren. Más adelante, se accede a la impresionante terraza, que cuenta con su zona de bar con mesas altas, y otra parte de restaurante donde abunda la vegetación y se pueden disfrutar las vistas de la sierra.